Primera semana enseñando

Fue llegar al colegio y empezar a sentir un cosquilleo, volver a sentirte como un niño estando en tu antiguo colegio donde has pasado tantos años y donde han ocurrido tantas cosas fue una sensación increíble. Comienza a presentarse a toda la plantilla y te asignan un tutor, en mi caso, estoy en la clase de 5ºB. He de decir que al principio me pareció una locura, yo prefería niños un poco más pequeños, que fuesen más inocentes y cariñosos pero me adentré en la experiencia llena de energías y fuerzas.

Han ido pasando los días, ya ha pasado una semana, y no puedo olvidar que dentro de poco todo acabará, ahora que ya voy conociendo a cada niño y cada profesor. Todos ellos son importantes y ni un sólo día salgo del colegio sin haber aprendido algo nuevo. Todos los profesores y alumnos me tratan con respeto y cariño. Parece ser que me he convertido en la confidente de muchos de estos niños pero siempre recordándoles, por supuesto, que soy su profesora. Aprendo mucho con ellos y creo que está siendo una experiencia muy enriquecedora.

Cada día que pasa me doy cuenta de que esta es la profesión que yo he querido desde siempre y cada mañana al despertarme pienso en ellos, sólo tengo ganas de llegar al colegio y verlos en la fila preguntándome cosas y deseando aprender, y eso es lo que realmente merece la pena...

Natalia.