lunes, 3 de febrero de 2014

Una experiencia enriquecedora

Hoy ha sido un lunes muy extraño. He echado de menos salir de mi casa corriendo y hacer con mis compañeros la ruta de todos los días para ir al colegio. Este mes ha sido muy intenso, pues ha estado lleno de aprendizajes y nuevas experiencias sobre las que ahora toca reflexionar.

Aunque en un principio estaba decepcionada porque no me había tocado el colegio que pedí, ahora sólo puedo dar las gracias por haber podido hacer las prácticas en el CEIP Ciudad de la Paz. El ambiente del centro es muy bueno y los profesores son muy trabajadores, se implican con muchas ganas en la enseñanza de sus alumnos y, sobre todo, existe un gran compañerismo entre todos ellos. Me siento muy agradecida con todos los profesores del centro y el equipo directivo ya que nos han permitido formar parte de varias experiencias en las que estaban involucrados y nos han prestado su ayuda siempre que ha sido necesaria.

Pero sin ninguna duda de quien más he aprendido ha sido de mi tutora, a quien le doy las gracias por todo lo que me ha enseñado. Me resultó muy agradable lo cercana que es con sus alumnos, la buena relación que tienen todos ellos. Sin ninguna duda todo esto influye en la creación de un ambiente propicio para el aprendizaje. Además, los alumnos de mi grupo eran muy trabajadores y bastante cariñosos. Mostraban mucho interés hacia el aprendizaje y la realización de las actividades que les planteábamos. Ha sido muy gratificante trabajar con todos ellos.

También me gustaría mencionar y agradecer a mis compañeros de prácticas. Hemos trabajado juntos como un equipo y los resultados han sido bastante satisfactorios, sólo había que ver la ilusión de los niños el día de la Paz o al entrar a la sala de cine que preparamos.

Por último, resaltar que la estancia en el colegio me ha permitido poner en práctica muchos de los conocimientos adquiridos en la Universidad. Entre ellos podemos destacar tanto los aspectos relacionados con la organización del centro, como los relativos a la diversidad del alumnado, y en especial los de ciencias experimentales, que me motivaron para llevar a cabo algunos experimentos en el aula.

Todo esto y más es lo que me llevo de estas magníficas prácticas. Las sonrisas de los niños, sus abrazos, sus risas, los momentos de trabajo en el aula y fuera de ella... Todo.


Ana Palomo

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